domingo, 18 de diciembre de 2011

Feliz Navidad .

Viene cada año y vendrá para siempre. Y con la Navidad vienen los recuerdos y las costumbres. Esos recuerdos cotidianos humildes a los que todas nos agarramos. Atravesamos tiempos muy duros por la situación que hay en  nuestro país , también nos faltan algunos de nuestros seres queridos , en otras familias hay enfermedades etc .
En fin  muchos dramas en las familias , pero a pesar de todo , deseo que todos la vivamos de la mejor manera posible poniendo un poquito de nuestra parte . Y tengamos en los mejores momentos , gratitud.
Para los malos momentos un millón de esperanzas ,y  que cada día que amanezca , tengamos una nueva ilusión.
Y siempre, siempre deseo  a todos mucha felicidad.

viernes, 16 de diciembre de 2011

¡ Vuelve a empezar !












Aunque sientas el cansancio;

aunque el triunfo te abandone;

aunque un error te lastime;

aunque un negocio se quiebre;

aunque una traición te hiera;

aunque una ilusión se apague;

aunque el dolor queme los ojos;

aunque ignoren tus esfuerzos;

aunque la ingratitud sea la paga;

aunque la incomprensión corte tu risa;

aunque todo parezca nada;

¡VUELVE A EMPEZAR!

Nos dice que los problemas que tenemos que enfrentar son nada si tenemos este tipo de pensamiento.


domingo, 4 de diciembre de 2011

Mi mamá mi amiga .


Dos amigos se encontraban tomando un café, y uno le comenta en tono de queja al otro:
 Mi mamá me llama mucho por teléfono a la oficina y solo para pedirme que vaya a conversar con ella, siempre la misma quejadera, que “se siente sola”; la verdad yo voy poco y en ocasiones siento que me molesta su forma de ser. Ya sabes como son los viejos: Cuentan las mismas cosas una y otra vez y sin mencionar de los achaques que estrena cada día; y bueno, como tu sabes nunca me faltan los compromisos: Que el trabajo, que los amigos, la Asociación.. .. En fin sabes como es, no?………
El otro amigo se queda callado, y luego responde:
Yo en cambio, converso mucho con mi mamá; cada vez que estoy triste, voy con ella; cuando me siento solo o cuando tengo un problema y necesito fortaleza, acudo a ella y ella me conforta, me da fortaleza, y siempre termino sintiéndome mejor.
Caramba – se apenó el otro – Eres mejor que yo.
No lo creas, soy igual que tu, o al menos lo era – respondió el amigo con tristeza. En realidad visito a mi mamá en el cementerio. Murió hace tiempo, pero mientras estuvo conmigo, tampoco yo iba a conversar con ella pensaba y sentía lo mismo que tú. Y no sabes cuanta falta me hace ahora su presencia, cuánto no daría por sentir las caricias que con tanto amor me prodigaba, y que rechazaba porque “ya no era un niño”; ó cuánto me pesa no haber escuchado todos los consejos que me daba, cuando con torpeza le decía:
“Yo sé lo que hago”, y por ello cometí muchos errores. Ay amigo, si supieras ahora como la busco, y ahora es mi mejor amiga.
Cuando sentado en la tierra fría del camposanto mirando solo su foto en el muro gris, en el que le puse “te amo”, (palabras que nunca escuchó de mis labios), le pido que me perdone por haber sido tan frío, por las veces que le mentí, y por los muchos besos que no le di, más el silencio me responde y cuando una brisa acaricia mis mejillas, sé que ella me perdona.
-Mira con ojos empañados a su amigo y luego dice- Discúlpame este arranque, pero si de algo te sirve mi experiencia, conversa con ella hoy que la tienes, valora su presencia resaltando sus virtudes que seguro posee, deja a un lado sus errores, que de una u otra forman parte de su ser. No esperes a que esté en un cementerio porque ahí la reflexión duele hasta el fondo del alma, porque entiendes que ya nunca podrás hacer lo que dejaste pendiente, será un hueco que nunca podrás llenar. No permitas que te pase lo que me pasó a mí.
En el camino, iba pensando en las palabras de su amigo. Cuando llegó a la oficina, dijo a su secretaria: Comuníqueme por favor con mi madre, no me pase mas llamadas y también modifique mi agenda porque este día lo dedicaré a ella!.
¡¡No dejes pasar este día sin decir “te amo”.



Mensaje


Señor, ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me das humildad, no me quites la dignidad.
Ayúdame siempre a ver las otra cara de la medalla, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.
Enséñame a querer a la gente como a ti mismo y a no juzgarme como a los demás.
No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso.
Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es lo más grande del fuerte y que la venganza es la señal del débil.
Si me quitas el éxito, déjame fuerza para triunfar del fracaso.
Si yo faltara a la gente, dame valor para disculparme y si la gente faltara conmigo dame valor para perdonar.
Señor, si yo me olvido de ti, no te olvides de mí
Mahatma Gandhi